RADIO "PONCHOSVERDES.FM"

viernes, 19 de abril de 2013

La última beguina, Marcella Pattijin (1920-2013)



Hay movimientos, corrientes, que son efímeras, otras perduran en el tiempo. Algunas, al final, se acaban extinguiendo. Hace unos días nos dejaba una monja nonagenaria cuyo fallecimiento no habría traspasado los muros de su hogar si no fuera porque con ella terminaba un movimiento religioso cuyos orígenes hemos de buscar en los remotos siglos medievales. Marcella Pattijin fue la última beguina, la última de una larga lista de mujeres que escogieron el mundo de la mística y la piedad sin renunciar a su vida seglar, unas mujeres que revolucionaron, a su manera, la manera de vivir en religión. Muchas de ellas se convirtieron en poetas destacadas de la mística medieval.

La monja que no podía ver
Marcella Pattjin nació en el Congo Belga en 1920. La ceguera que sufría no fue obstáculo para una mujer llena de energía y mucha fuerza de voluntad. En Bruselas, cuando era una joven de 20 años con profunda vocación religiosa, ningún convento quiso aceptarla. Pero Marcella no se rindió y siguió buscando su lugar en el mundo. Ese lugar se encontraba en Sint Amandsberg, una comunidad de más de doscientas beguinas situada cerca de Gante. Esas mujeres eran herederas de un movimiento religioso que nació en la Edad Media y que cambió radicalmente la manera de vivir como monjas. Aquellas beatas decidieron vivir unidas pero sin seguir ninguna orden religiosa.

Marcela estuvo en Gante buena parte de su vida ayudando en el cuidado de enfermos. En su tiempo libre tocaba el acordeón y la mandolina.

Hasta 2005 vivió con otras ocho beguinas en Kortrijk a las que sobrevivió. Desde entonces vivía en una residencia debido a su avanzada edad. 

Murió el pasado domingo 14 de abril mientras dormía. Su muerte ponía punto y final a una historia que había durado 800 años. Ella fue la última de un grupo de mujeres excepcionales, mujeres de profunda fe que no quisieron renunciar a la vida. Algo que en el siglo XXI puede sonar ingenuo, pero que en las rígidas estructuras medievales fue una auténtica osadía.





Por Sandra Ferrer

miércoles, 17 de abril de 2013

La reina del Prado, María Isabel de Braganza (1797-1818)


La reina María Isabel de Braganza tuvo una vida muy corta pero su papel en el mundo del arte y la cultura fue determinante en la historia de nuestro país. No en vano, fue ella quien motivó la creación del Museo Nacional del Prado, una de las pinacotecas más importantes del mundo. Pero en lo personal, María Isabel tuvo una existencia desdichada. De Portugal al exilio brasileño con una familia en la que había poco amor, para volver a Europa a casarse con su tío, el monarca español Fernando VII, María Isabel de Braganza falleció con poco más de veinte años a causa de una terrible equivocación médica. 

La infanta portuguesa
María Isabel de Braganza y Borbón nació el 19 de mayo de 1797 en el Palacio Real de Queluz, en Portugal. Era la primogénita de los futuros reyes Juan VI y Carlota Joaquina. Detrás de ella nacieron ocho hijos más, a pesar de que el matrimonio real no fue una relación en la que reinara el amor. De hecho, en 1806, cuando María Isabel aún no había cumplido los diez años, sufrió la separación de sus padres.

La pequeña infanta fue educada con esmero por profesores afines a la Compañía de Jesús y recibió una exquisita formación artística. 

Pero su vida en Portugal terminó el 27 de noviembre de 1807 cuando la familia real tuvo que marchar al exilio tras las invasiones napoleónicas de la península. En Brasil, María Isabel permaneció junto a su madre, pues sus progenitores continuaron manteniendo vidas separadas. 

Reina de España
En 1814, el rey español Fernando VII, quien también había sufrido su propio exilio, volvía victorioso. Restaurados los Borbones en el trono de España, Fernando VII decidió volver a casarse y la elegida fue su sobrina, María Isabel de Braganza (su madre era hermana de Fernando).

El 22 de febrero de 1816 se firmaban las capitulaciones matrimoniales de un doble enlace. María Isabel se casaría con su tío Fernando mientras que su hermana María Francisca se casaría con el hermano de este, Carlos María Isidro. 

Un mes después, las dos infantas iniciaban un largo viaje hacia tierras españolas. El 28 de septiembre de 1816 se encontraban las dos hermanas cerca de Madrid con sus ya entonces esposos con los que se habían casado por poderes en Cádiz. Fernando tenía entonces treinta y dos años y ella diecinueve. La ceremonia de ratificación de los dos enlaces se celebró en la iglesia madrileña de San Francisco el Grande.

Dos meses después, María Isabel empezó a notar los síntomas de un primer embarazo. Pero la alegría inicial duraría muy poco tiempo. La infanta María Isabel Luisa, nacida el 21 de agosto de 1817, no superó los cinco meses de vida. 

La impulsora de las artes
María Isabel de Braganza era una gran aficionada al arte. En una estancia en El Escorial visitó las obras de restauración del monasterio que había quedado dañado después de la guerra de la Independencia. En sus sótanos descubrió un gran número de obras de arte mal apiladas  y pensó en exponerlas en el palacio de Riofrio. Los lienzos eran obras de grandes maestros italianos y españoles y que se habían trasladado allí desdel desaparecido Alcázar de Madrid. Otras eran pinturas expropiadas por los franceses que se habían almacenado en aquellos sótanos para ser trasladadas con posterioridad a París. 

El pintor Francisco de Goya propuso entonces a María Isabel que las trasladara de nuevo a Madrid donde se podrían mantener mejor y podrían ser admiradas por un mayor número de personas.


Museo del Prado (Foto: http://www.museodelprado.es/)

El lugar para albergar aquella incipiente pinacoteca fue el Gabinete de Historia Natural, un edificio aún por terminar que había mandado construir Carlos III, abuelo de su esposo. Nacía así el Museo del Prado, gracias a la inquietud artística de la reina María Isabel de Braganza.  

Una cesárea mortal
María Isabel se volvió a quedar de nuevo embarazada, un embarazo que se vivió con cierta preocupación por parte de los médicos. El 26 de diciembre de 1818 empezaron las primeras contracciones. El parto se alargó hasta que la reina sufrió una preeclampsia que las crónicas del momento denominaron una alferesía. Lo cierto es que horas antes de iniciarse el parto, la reina se había visto aquejada de unos fuertes dolores de cabeza, preludio del terrible desenlace. Los médicos, ante el cuerpo inconsciente de María Isabel, la creyeron muerta. El rey dio autorización para practicar a su esposa una cesárea de urgencia e intentar salvar a un posible heredero al trono. Mientras, su hermana María Francisca insistía en esperar creyendo que María Isabel no había muerto. No se equivocaba. Cuando el médico empezó a cortar el vientre de la reina ésta dio un grito desgarrador. Sin ninguna compasión para la parturienta, la cesárea no se detuvo. María Isabel murió desangrada. Tenía solamente veintiún años. La niña que extrajeron de su vientre moría a los pocos minutos. 

María Isabel no dio a la corona el ansiado heredero, por eso fue enterrada en el Panteón de Infantes de El Escorial. Fue sin embargo gracias a ella que hoy podemos disfrutar de una de las pinacotecas más importantes del mundo. 

El Real Museo de Pintura se inauguraba el 19 de noviembre de 1819, un año después de su muerte. El pintor Bernardo López Piquer inmortalizó a María Isabel en un bello cuadro en el que aparece señalando con una mano el edificio del que sería el Museo del Prado y con la otra se apoya sobre los planos del mismo. 

 Si quieres leer sobre ella 


Los espejos de Fernando VII, Mª Pilar Queralt del Hierro
Género: Novela histórica






Ginecología y vida intima de las reinas de España, Enrique Junceda
Género: Ensayo







Por Sandra Ferrer

martes, 16 de abril de 2013

La escritora que espió, Aphra Behn (1640-1689)


Considerada como la primera escritora profesional en lengua inglesa, Aphra Behn tuvo una vida de novela. Desde Londres, a Suriman para terminar arruinada después de trabajar como espía al servicio del rey inglés Carlos II, Aphra Behn decidió dedicarse a la literatura para poder sobrevivir. Independiente, escandalosa a los ojos de muchos hombres, de ella dijo Virginia Woolf que gracias a su trabajo había ganado para las mujeres el derecho a expresar sus ideas. 

La joven de origen incierto
La biografía de Aphra Behn es incierta. Se sabe que Aphra Johnson nació en diciembre de 1640 pero no la fecha ni el lugar exacto, aunque este podría haber sido en Canterbury. Fue la segunda hija de un barbero llamado Bartholomew Johnson y su esposa Elizabeth Denham.

Nada se sabe sobre su educación, si recibió o no formación. Siendo una niña, Aphra estuvo viviendo unos años en la colonia de Suriman de la que volvió a principios de la década de 1660. En 1664 se habría casado con un tal Señor Behn, un hombre de origen alemán dedicado al comercio y con una carrera profesional bastante lucrativa. Aunque no se sabe si llegó a casarse formalmente, lo cierto es que al año siguiente fallecía el Señor Behn.

La espía del rey
Terminado su matrimonio de manera misteriosa, Aphra Behn inició una vida licenciosa estableciendo relaciones amorosas con distintos hombres. Entre ellos, podría haber estado el propio rey inglés Carlos II. Que fueran amantes o no no está claro pero sí el hecho de que Aphra viajó a Amberes donde trabajó como espía de la corona inglesa durante la guerra entre Inglaterra y Holanda que tuvo lugar entre 1665 y 1667. 

Su experiencia como espía no fue en absoluto positiva para Aphra. El sueldo mísero que recibía del rey, cuando lo recibía, la pusieron en una situación económica complicada. No sólo perdió su fortuna sino que tuvo que pasar un tiempo en prisión a causa de las deudas. 

La escritora profesional
Una vez recuperada la libertad, Aphra Behn encontró en la literatura una manera de seguir adelante y poder mantener su independencia. 

Aphra empezó escribiendo obras de teatro. En 1670 se estrenaba con gran éxito El Matrimonio Forzoso. A partir de entonces no dejó de escribir obras de teatro plagadas de humor y sátiras acerca de los matrimonios de conveniencia y las relaciones entre hombres y mujeres. También escribió algunas obras en verso y novelas. 

De toda su obra, la más importante para las letras inglesas fue posiblemente Oroonoko o El esclavo real, una novela publicada en 1688 en la que plasmó sus experiencias en las colonias y se convirtió en la primera obra antiesclavista. 

A pesar de su actitud liberal y desenvuelta de Aphra Behn a quien además no le tembló el pulso a la hora de tratar temas controvertidos en su época, al final fue considerada la primera escritora profesional en lengua inglesa y uno de los puntales de referencia de las obras de escritores posteriores.

Aphra Behn fallecía el 16 de abril de 1689. Fue enterrada en la Abadía de Westminster. 

 Su obra 


El príncipe Oroonoko








Las fábulas del deseo y otros relatos








El exiliado









Por Sandra Ferrer

domingo, 14 de abril de 2013

La emperatriz solitaria, Isabel de Portugal (1503-1539)


Las mujeres que han vivido a la sombra de grandes hombres, su biografía ha estado inexorablemente ligada a la de su consorte. Es el caso de Isabel de Portugal, cuya vida estuvo ligada emocional y políticamente a su esposo, el emperador Carlos V. Desde que se casó con su primo, Isabel tuvo una existencia solitaria, sufriendo las largas ausencias de un gobernante de tal magna extensión de tierras que era imposible controlar personalmente. Hasta cuatro largos años sufrió la soledad que tuvo que sobrellevar con su papel de gobernadora de España en ausencia de Carlos. Algunos de sus biógrafos aseguran que esa soledad fue causa importante de su muerte prematura. La emperatriz del Sacro Imperio Romano no salió nunca de la Península, en la que permaneció fiel a su marido hasta el final de su corta vida. 

La prima del rey
Isabel de Avis y Trastámara nació el 24 de octubre de 1503 en el palacio real de Lisboa. Sus padres eran el rey de Portugal Manuel I y su segunda esposa María de Castilla. Esta era hija de los Reyes Católicos, igual que la madre del futuro emperador Carlos V, Juana, conocida como La Loca, con lo que ambos eran primos.

Isabel fue educada con gran esmero. Latín y otras lenguas, nociones de ciencias, música y una profunda formación religiosa recibió Isabel siguiendo la educación que había recibido su madre en la corte humanista de los Reyes Católicos. 

Pero la vida tranquila y feliz del palacio lisboeta se vio truncada en 1517 cuando la reina María falleció al dar a luz a su octavo hijo. Isabel, que entonces tenía 13 años, queda huérfana junto a sus hermanos. Al drama que supuso perder a su madre, los hijos del rey Manuel vieron como este al año siguiente se casaba con Leonor, hermana de Carlos y por tanto prima de los que terminarían siendo sus hijastros. Ante semejante situación, el recelo inicial fue evidente aunque con el tiempo Isabel consiguió mantener una estrecha relación con su prima y madrastra. 




Gobernadora de España
En aquellos años ya hacía tiempo que la boda de Carlos empezaba a ser un asunto que afectaba no sólo a España sino también al resto de todos los territorios que había recibido en herencia en Europa, África y América. La mujer que se casara con él debía ser elegida con máximo tino y acierto. El nombre de su prima Isabel siempre estuvo en el tablero de las negociaciones pero varios hechos en la política europea retrasaron en más de una ocasión la decisión.

Pero a punto de finalizar en año de 1521, fallecía Manuel I y le sucedía su hijo Juan III, hermano de Isabel y soltero como su primo Carlos al que le ofrece afianzar las relaciones entre España y Portugal mediante la negociación de un doble matrimonio: el rey portugués se casaría con Catalina, la hermana pequeña de Carlos, y éste aceptaría por esposa a su prima Isabel.

Sin embargo aún pasarían unos años hasta que el doble acuerdo matrimonial se viera realizado. Mientras Catalina salía de su larga reclusión en Tordesillas junto a su madre, la reina Juana, en 1525, Isabel tendría que esperar un poco más.

El 17 de octubre de 1525 se firman las capitulaciones matrimoniales y el 1 de noviembre tiene lugar en el palacio real de Almeirim la boda por poderes. Convertida entonces en la esposa del emperador Carlos V, Isabel viaja hasta Sevilla donde tiene que esperar hasta marzo de 1526 para conocer a su marido. El 11 de marzo se casaban en los Reales Alcázares sevillanos. 

Un matrimonio a todas luces de compromiso, con un largo y difícil camino de negociaciones dinásticas, económicas y políticas, fue sin embargo, un matrimonio de amor sincero. Isabel y Carlos, a pesar de no haberse escogido por amor, desde el primer momento sintieron un mutuo afecto que fue derivando es una mayor estima a lo largo de los años. 

Aquel mismo verano, cuando la pareja imperial está instalada en Granada, se conocen los primeros síntomas de embarazo en Isabel. Pero ya entonces, la joven emperatriz verá como su vida privada se altera por causa de los acontecimientos internacionales. Aquel mismo agosto de 1526 los turcos amenazan el este de Europa tras salir victoriosos en la batalla de Mohacs, mientras, el rey francés Francisco I sigue amenazando al emperador con una nueva guerra. Todo ello hace que la pareja tenga que terminar su tranquila estancia en Granada y trasladarse lo más rápido posible a Valladolid. 

El 21 de mayo de 1527 nace el príncipe Felipe. Pocos meses después, ya en 1528, Isabel queda por primera vez sola como gobernadora con los plenos poderes recibidos de su esposo. Pero vuelve pronto de Aragón para reencontrarse con su esposa, de nuevo embarazada. El 21 de junio de 1528 nace su segunda hija, María, dejando a la emperatriz peligrosamente debilitada. 

En marzo de 1529 Carlos no puede demorar su viaje a Italia que se encuentra más que revuelta después del Saco de Roma sufrido dos años antes. 

En aquella larga ausencia Isabel tiene su tercer hijo, Fernando, nacido el 22 de noviembre de 1529. La noticia le llega al emperador en Bolonia. Pero no llegará a conocer al niño que fallecerá el 13 de julio de 1530 sumiendo en la tristeza a la emperatriz. Una tristeza que debilita a Isabel hasta hacerla caer enferma de unas peligrosas fiebres tercianas. 




Tres años después, tiempo en el que la joven gobernanta ha tenido que reponerse de sus enfermedades y tristezas y seguir adelante con su cometido político, se reencuentra por fin con su añorado esposo. De este nuevo encuentro nacerá en 1535 una nueva infanta, bautizada como Juana.

Pero la alegría de Isabel durará sólo dos años. Un nuevo conflicto, esta vez en Túnez, vuelve a alejar al emperador de tierras españolas. En 1536 la familia imperial se reúne de nuevo y en 1537 Isabel vuelve a sospechar la llegada de un nuevo hijo. Cuando el 19 de octubre da a luz a Juan, vuelve a estar de nuevo sola y en tal estado de salud que hace temer lo peor. Carlos consigue regresar al lado de Isabel a la que vuelve a dejar embarazada de su sexto hijo, un niño que nacerá muerto el 19 de abril de 1539 a los cuatro meses de embarazo.

Isabel de Portugal no sobrevivió a este último parto. Con 36 años de edad, el 1 de mayo de 1539 fallecía a causa del aborto sufrido pero también muy probablemente por su debilitada salud, alimentada de la tristeza y la soledad que durante demasiado tiempo sufrió en su corta vida. 

Isabel fue una buena reina, hizo aquello que se esperaba de las mujeres de la realeza, dar muchos herederos a su rey y ayudar en lo posible en el gobierno de sus reinos. Pero es más que probable que como mujer, fuera muy desdichada. Ilusionada en un primer momento por un matrimonio que, a pesar de ser concertado, fue del agrado de ambas partes, se topó con una realidad de responsabilidades políticas prematuras, largos periodos de soledad y una salud débil agravada por los constantes embarazos y alumbramientos. 

Enterrada en Granada y trasladados sus restos años después a El Escorial, Isabel fue una reina hermosa, culta y piadosa. Su esposo quedó desolado por la pérdida de su esposa a la que amó y respetó desde el primer día pero a la que condenó a vivir una vida en soledad.

 Si quieres leer sobre ella


La emperatriz, Alfredo Alvar Ezquerra
Género: Biografía






Las mujeres de Felipe II
María Pilar Queralt del Hierro






Reinas de España, Las Austrias, María José Rubio
Género: Biografías








Ginecología y vida íntima de las reinas de España (I), Enrique Junceda Avelló
Género: Ensayo







Por Sandra Ferrer

jueves, 11 de abril de 2013

Neomachismos: nuevos ataques, nuevas respuestas


En los últimos años asistimos a un nuevo fortalecimiento de una serie de discursos machistas que relativizan y avalan de forma explicita o sutil las desigualdades de género y la violencia hacia las mujeres y las sexualidades no normativas.

Desde los clásicos posicionamientos públicos de altos mandatarios de la jerarquía eclesiástica en contra del matrimonio homosexual, el aborto o los anticonceptivos; hasta las declaraciones de diputados como Toni Cantó contra la ley de violencia de género, esgrimiendo la falacia de que la mayoría de las denuncias son falsas; pasando por la intención expresa del Ministro Gallardón, reiterada en varias ocasiones, de reformar la ley de aborto para limitar nuevamente la libertad de las mujeres de decidir sobre sus cuerpos.
Esta nueva ola de discursos machistas se inserta en un contexto de feminización de la pobreza y endurecimiento del capitalismo con importantes recortes en las políticas de igualdad.¿Pero qué tiene de “nuevo” este machismo?Diversos análisis coinciden en que tales discursos no son tan nuevos sino que son el resultado de la actualización, a través de modos y canales distintos, de una lógica patriarcal de dominación y explotación más que consolidada en el tiempo. Una lógica que sigue operando a través de canales clásicos a los que ahora hay que sumar los nuevos medios en el terreno de lo virtual (blogs, redes sociales, plataformas, foros).
Los análisis feministas también coinciden en queestos discursos sociales del machismo son en cierta medida una reacción al establecimiento y desarrollo de las políticas de igualdad (ley de aborto, ley de violencia de género, ley de matrimonio entre personas del mismo sexo, etc.). Pero sobretodo constituyen toda una una respuesta social a un cambio en las relaciones de género que, gracias a los movimientos feministas, ha conllevado mayores cuotas de igualdad/libertad para las mujeres.

Mutaciones del patriarcado: nuevos ataques machistas

Como señalan Nieves Salobral y Soraya G. Guerrero en el artículo "Violencia machista a debate", los discursos neomachistas tienen en común una minimización de la importancia de la violencia masculina y de la desigualdad estructural entre hombres y mujeres, una crítica constante a las políticas de igualdad institucionales y un importante cuestionamiento de la actitud de algunas mujeres y feministas a las que se responsabiliza de la reacción agresiva de los varones. Además, consideran que el contexto es fuertemente favorable a las mujeres y llegan a percibir al hombre como una víctima de los excesos femeninos y de la lucha por la libertad de las mujeres.
El colectivo Ioé, en su estudio sobre las actitudes de la población ante la violencia de género en España, distingue entre “machismo resentido”, “a la defensiva”, “magnánimo antiautoritario” e “igualitarismo inconsecuente”. En intersección con esta clasificación podríamos distinguir diferentes articulaciones de las respuestas machistas a las luchas feministas:
Por un lado, tendíamos los movimientos de hombres supuestamente afectados por las leyes de género, entre los cuales, en el contexto del Estado español, destaca Federgen. Las diferentes asociaciones que conforman esta federación, junto a los grupos de hombres divorciados y por la custodia compartida, dan cuenta del modo en que el patriarcado se rearticula en un contexto de crisis capitalista y de inestabilidad de los vínculos familiares tradicionales. Nuevos mitos, como el de las denuncias falsas por violencia de género, o el síndrome de alienación parental, “toda una respuesta neomachista al abordaje penal de la violencia”, como afirma la psicóloga Fátima Urzanqui, se unen a los viejos discursos sobre violencia machista. En este caso resultan paradigmáticas las recientes declaraciones del diputado de UPyD, Toni Cantó, quien se erige así como uno de los “portavoces de los discursos neomachistas”, o propuestas tan misóginas, androcéntricas y antifeministas como la del autodenominado Ministerio del equilibrio.
En consonancia con los anteriorioes, encontraríamos las plataformas católicas y/o de derechas que han acuñando el concepto “ideología de género” para referirse a una supuesta ofensiva que desbinarizaría a la población (diluyendo la “natural” división entre hombres y mujeres), atacaría a la heterosexualidad, amenazaría la familia nuclear y destruiría los valores “legítimos” (católicos). Según la presentación del I congreso Internacional de Ideología de Género, celebrado en Navarra en 2011, la categoría de género si bien “en su origen remitía a la base biológica de la diferencia sexuada, progresivamente corre el riesgo de suplantar dicha base, hasta llegar a abolirla”.
En este sentido, está teniendo lugar un intento de apropiación del concepto “feminismo” para desactivar su connotación subversiva y asociarlo a una acrítica e insípida “igualdad” de derechos y oportunidades que no tiene en consideración las relaciones de poder generizadas ni la organización heteropatriarcal de las sociedades. Otro buen ejemplo de ello lo constituye la plataforma Otro feminismo es posible, la cual pretende conformarse como una suerte de “feminismo verdadero” pro-igualdad frente al que ellxs denominan “feminismo radical” y/o hembrista, el cual abarcaría desde las mujeres de la izquierda y centroizquierda institucional hasta teóricas y académicas feministas pasando por activistas feministas de toda índole (asociadas, participantes en ONG, autónomas...).
Resulta muy interesante también, a la vez que problemático, asistir al modo como se están desarrollando toda una serie de teorías conspiracionistas sobre el origen y desarrollo de los movimientos feministas a los que se les identifica con un lobby y se les llega a asociar con Rockefeller u organizaciones como la CIA. Artículos como el difundido por el blog Información por la verdad condensan todo el imaginario esencialista y en pos de “reequilibrar la balanza” que mencionábamos anteriormente.
Estas teorías de la conspiración profundamente antifeministas se están desarrollando también, aunque de manera relativamente marginal, desde los movimientos sociales autónomos. Autorxs de dudosa credibilidad como Félix Rodrigo Mora o Prado Esteban, con su voraz crítica al feminismo de Estado (en el que incluyen a todo el feminismo),asocian el movimiento feminista al fomento del capitalismo y la explotación llegando a identificar feminicidio con el “exterminio de mujeres” que, según ellos, realiza el feminismo.
Por otro lado, en la esfera virtual nos encontramos no solo con discursos claramente machistas y de condescendencia y trivialización de la opresión sino también con una serie de agresiones virtuales más o menos organizadas (mensajes descalificadores y humillantes y amenazas de agresiones físicas y sexuales) hacia mujeres feministas que tienen una importante actividad política en la red. En este sentido, casos como el acoso sufrido por Anita Sarkeesian en EEUU, a raíz de su proyecto “Feminist Frequency” o, en el contexto español, por Alicia Murillo desde el sitio Forocoches, han abierto el debate sobre cómo afrontar los “cíberataques” y cómo desarrollar nuevas estrategias desde los feminismos.
A nivel más espontáneo y sin una organización explícitamente política encontramos a los troles machistas que actúan a nivel individual y colectivo a través de la red. Foros, facebook, twitter, youtube, blogs e incluso correo electrónico son sus canales de ataque. Según el completísimo artículo "Trol machista, moretones virtuales", “el anonimato, la tolerancia al trol que se da en la red y la dificultad para establecer el límite entre el 'troleo' y la amenaza son algunos factores que hacen de los entornos virtuales un campo abonado para el trol machista”. Entre los troles machistas también hay diferencias significativas, pero podríamos definirnos de forma simplificada y grosso modo en dos tipos: los forococheros y los buenistas.
Los troles provenientes de foros como Forocoches. A través de estos foros los troles localizan y difunden publicaciones o proyectos feministas en la red para que sus usuarios acudan en masa con relativa velocidad a boikotear la inicitaiva. Los troles forococheros actúan con un discurso soez, violento y abiertamente machista: “lo que le hace falta es una buena polla”, “a fregar!”, “putas”, “te llega el WIFI a la cocina”, “depílate”, etc. Asimismo, esgrimen tópicos manidos sobre las feministas como “gordas amargadas”, “lesbianas”, “peludas”, “brujas”, “malfolladas”, etc. Un caso reciente y paradigmático de odio, insulto y acoso machista de este tipo es analizado Lucía Egaña en su artículo "Globalización machista".
¿Qué sucede cuando estos discursos provienen no tanto de la derecha, la iglesia o la socialdemocracia sino del otro lado del campo de batalla, esto es, de espacios progres, izquierdosos o incluso movimientos sociales supuestamente afines al feminismo? Encontramos a los troles bienpensantes, políticamente correctos o “buenistas”. Estos troles no actúan en masa, sino de manera individual, pero todos comparten el mismo discurso, con pocos matices entre sí. Sus intervenciones son más elaboradas, largas y refinadas y pretenden demostrar más autoridad intelectual que los troles forococheros. Una de sus características principales es que realizan un llamado a guardar las formas. Bajo el recurrente, “te hablo desde el respeto”, se cubren las espaldas ante una posible respuesta feminista contundente, que habitualmente es identificada como ataque, insulto o, en el caso que no se le dedique toda la energía y tiempo que ellos exigen, cobardía.
Los buenistas suelen tener un discurso progresista que condena el machismo más rancio y recalcitrante -en algunos casos se muestran incluso afines a las políticas de igualdad-, pero carecen de conocimientos sobre teoría y práctica feminista. A pesar de ello se sienten legitimados para aleccionar, juzgar y poner en duda las estrategias y formas de expresión de las feministas. Coleccionan un argumentario basado en tópicos y nociones que niegan las relaciones de poder y dominación patriarcales preexistentes: “todos somos iguales”, “yo no me fijo en el género sino en la persona”, “quiero la armonía entre los sexos”.
Aunque este discurso se nos han repetido hasta la saciedad a las feministas para descafeinar nuestras luchas y estrategias, a ellos les suelen parecer original, novedoso e iluminador. Habitualmente atacan a algunas feministas con los términos “radical”, “hembrista” o “extremista” y afirman que ellas llevan a cabo un machismo a la inversa (porque el “feminismo, no lo que hacéis vosotras, es un movimiento muy digno que lucha por la igualdad”) o reducen la lucha feminista a una mera guerra de sexos.

Algunas de las frases y lugares comunes del machista “buenista”

"Por ese camino no vais bien", "así no vais a llegar a la gente", "la estáis cagando con tanta radicalidad", "estáis manchando la imagen del feminismo", “el verdadero/correcto feminismo es...”, "lo que os pasa a vosotras es que confundís X con Y", "hay que educar y ser más comprensivas, no tan violentas", "yo creo en la igualdad, en las personas, no en este feminazismo/hembrismo", "yo estoy de acuerdo con lo que decís pero...", "lo que tenéis que hacer es...", y sobretodo, "os hablo desde le respeto”.
Vemos como se produce una actualización de los clásicos adjetivos para deslegitimar a las feministas (loca, histérica, bruja, mala, guarra) mediante el empleo reiterativo de otros apelativos: feminazis, hembristas, antihombres, radicales, exageradas o violentas. Un interesante análisis para comprender como el concepto “hembrismo” está operando, como antes lo hizo el de “feminismo”, para dividir a las feministas entre buenas y malas lo encontramos en el texto “3 días: feministas, feminazis y hembristas”.

Nuevas estrategias feministas

Estas nuevas formas de violencia desbordan la práctica feminista edificada hasta ahora, por lo que urge desarrollar nuevas formas de respuesta y considerar los nuevos retos que generan. Como dice Lucía Egaña en el artículo ya citado, estos nuevos ataques revisten un carácter endémico y transfronterizo, además de una indudable dimensión simbólica pues ocupan un lugar privilegiado en el terreno de la representación. Todo ello, junto a los nuevos canales de comunicación, son elementos a tener en cuenta para llevar a cabo acciones de respuesta contundentes y efectivas.
De este modo, el activismo feminista, organizado o no, está tomando la red, llevando a cabo acciones en el ciberespacio y reapropiándose de la tecnología.
Por un lado, encontramos en facebook y twitter una actividad espontánea, rápida y colectiva de condena a actuaciones machistas como, por ejemplo, las declaraciones de Toni Cantó, la elección del misógino y homófobo nuevo Papa o los ataques y acosos a las feministas. Una feminista en-red-ada hace un llamado y la autodenominada “manada” acude y se generan solidaridades inmediatas. Textos, imágenes, hastags (HT) en twitter, “escraches” en los muros, vídeos, etc. son los soportes de las respuestas. En este sentido, cabe destacar la generación de HT como #SomosManada, #FeministaEnRed, #FeministaEnTwitter (y la apropiación de HT ya existentes para lanzar el mensaje deseado) o proyectos como los Memes Feministas. Los memes, a través de la combinación de imágenes fácilmente reconocibles para el imaginario colectivo y frases generalmente humorísticas, facilitan el acceso a la teoría crítica feminista y constituyen una alternativa creativa a todo el humor sexista que circula por la red.
Por otro lado, la herramienta menos 2.0 de todas pero que aún opera y funciona son los blogs. Feministas conocidas y anónimas, encuentran en la red un espacio para expresarse y mostrar sus trabajos artísticos, teóricos, sus inquietudes, reflexiones... Asimismo, se establecen conexiones y se generan alianzas para la ocupación del espacio público virtual. Un blog personal con muchxs seguidorxs es el de Filósofa Frívola, quecon sólidas herramientas discursivas y mucho desparpajo pone en jaque al patriarcado. Esta filósofa analiza iconos de la cultura popular machista y los despedaza a través de diferentes estrategias: una de las más conocidas es la parodia delpolémico vídeo de Desigual “Tengo un plan”. Un blog colectivo reciente y reseñable es el de Sras que hablan de música, surgido a raíz de las reacciones que suscitó el artículo"Machismo gafapasta" y que analiza el sexismo cotidiano en la cultura pop.
Esta relativa “democratización” de las herramientas de creación han posibilitado que pueden ser utilizadas por los feminismos para para enriquecer estrategias las actuales de resistencia y transformación.Por ejemplo, en el contexto anglosajón, el proyecto videoblogger “Feminist Frequency” realiza, a través del vídeo, una lectura crítica de los medios de masas y de las representaciones de las mujeres en las narrativas de la cultura pop. En Colombia, las Féminas Festivas tienen un interesante proyecto de radionovela feminista que difunden a través de su blog.
En el Estado español, destaca el proyecto “El cazador cazado” de la ya mencionada Alicia Murillo quien, con la cámara de su teléfono móvil, graba vídeos en los que interpela a los “piropeadores” (acosadores callejeros) y posteriormente los sube a la red. También gracias a estas herramientas se pudo dar una respuesta humorística y potente al acoso que sufrió esta activista y otras mujeres que la apoyaron. Una serie de feministas de diferentes lugares (algunas de las cuales ni siquiera se conocían) grabaron, desde sus webcams, un rap parodiando la amenaza encontrada en esta entrada del blog de Ana Periférica del “Grupo Masculino de Liberación”. Los fragmentos de vídeo se centralizaron y en pocos días el vídeo editado estaba colgado en la red.
Es interesante analizar cómo entre estas estrategias destaca la reapropiación del insulto. Como ya hizo la Teoría Queer con la reivindicación del peyorativo queer(desviadx, raritx, marica), muchas feministas optan por resignificar las etiquetas con las que son desaclificadas (feminazi, radical, bollera) para darles la vuelta, desactivar su poder ofensivo y lucirlas con orgullo. Del mismo modo, desde el feminismo se generan categorías para responder a los nuevos tipos de ataques y de atacantes: “machirulo”, “machista-leninista”, “anarcomacho” o ”cutrequeer” responden a estas nuevas realidades o a realidades antes invisibilizadas.
También ocupan un lugar relevante las nuevas y no tan nuevas revistas on line, entre la que destacamos Píkara Magazine o Revista Vozal, que contienen artículos, vídeos y otros proyectos de feministas provenientes de todo el mundo hispanohablante. Las secciones de género y feminismo de medios alternativos y la emergencia de programas feministas en las radios libres constituyen del mismo modo soportes privilegiados para la expresión de reivindicaciones de las mujeres, lesbianas y trans y para la generación de conocimiento y acción feminista.
Y, por supuesto, siempre nos quedará la calle...
FUENTE: https://www.diagonalperiodico.net/libertades/neomachismos-nuevos-ataques-nuevas-respuestas.html